Bienvenidos a esta ventana al mundo.No pretendo hacer una guía detallada de cada viaje puesto que en internet hay mucha más información que la que yo os puedo dar, lo que pretende este blog es fundir dos de mis grandes pasiones: viajar y la fotografia y enseñar así las vivencias personales, las curiosidades y la manera de disfrutar un viaje de una manera muy particular: la mía.
Trataré de dar información útil, tanto en mis textos como con enlaces a distintas webs. Los artículos variarán en su composición dependiendo del tipo de viaje, pudiendo tener más contenido en texto o casi exclusivamente fotografias.
Por si interesa a alguien, el equipo fotográfico que uso consta de una compacta Canon PowerShot S50, una Canon EOS 400D y una EOS 7D con distintos objetivos: 18-50 de Canon, un 18-200 de Sigma y un macro de focal 50mm también Canon. También un flash speedlite 480 EXII y diversos cachivaches más que cada vez hacen más difícil cuadrar el peso de la maleta en los aeropuertos...

Como vereis, este espacio web no tiene publicidad, así que los comentarios son bienvenidos y siempre se agradecen.
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Espero que lo disfrutéis.

jueves, 22 de julio de 2010

19 de julio de 2010: SAN FRANCISCO


¿Qué puede ser lo más conocido de la Ciudad de San Francisco?... La Bahía, el tranvía, sus cuestas y su calle Lombart, Silicon Valley, el barrio gay de Castro... Bueno, quizá todo eso, pero hay algo que aún quedaba pendiente por ver: Alcatraz.



La isla de Alcatraz es Parque Natural, no por la carcel, por supuesto, si no por la vegetación que hay. La entrada al parque es gratuita, pero al ferry no... Y por supuesto, no vale la pena ahorrarse los 26$ que vale el pasaje y los 15 minutos que tarda en recorrer los 2 Kms, a cambio de ir nadando (que se lo pregunten a los presos que hubo allí).
El ferry se coge desde el muelle 39 y suele haber muchísima gente. Tanta que a veces se acaban las entradas.
Como todo es cuestión de gustos... Para mi, lo mejor de esa excursión, son las vistas de la Bahía.



El recorrido por la prisión me parece morboso. Te dan unos cascos por donde los verdaderos protagonistas de la cárcel (presos y carceleros) van narrando sus experiencias y cuentan aspectos cotidianos del día a día, así como motines que acontecieron.























Me pareció patético que cuando hablaban de las celdas de castigo se referían a lo pequeñas que eran con mucho orgullo y decía la narración: "no teníamos permitido apagarles las luces durante días, pero lo hacíamos, ja, ja, ja" [...]
¿Harán también de Guantánamo un "parque temático" cuando dejen por fin de usar esa cárcel como sitio de tortura? Seguro que sí.






















Aunque las vistas eran fabulosas y estaba lleno de alcatraces enormes, la verdad es que tenía bastantes ganas de salir de allí, y así lo hicimos a las 12:30 h.
La verdad es que los ferrys tienen una puntualidad exquisita.
Acabo de recordar que en el de ida, Luis y yo hicimos amago de pedir un café "capuchino" abordo y el camarero, que era hispano, nos dijo que si estábamos locos, que ni se nos ocurriera tomar café de ese y que lo dejáramos para los gringos...














Después de la escursión dimos una vuelta y comimos por la zona norte de los muelles o muelle del pescador (fisherman´s wharf), desde donde puede observarse la famosa comunidad de leones marinos que viven allí.



Cerca se encuentra la Coit Tower, una de las torres más altas de la ciudad de estilo art decó, dedicada a los que fallecieron en el terremoto de 1906 y que está ubicada en la colina del telégrafo y por la que pondrás a prueba tus piernas en caso de que no subas en coche. Una vez arriba, el ascensor hasta la cima vale 5$. Calculando lo que tardaba la gente en subir al ascensor y la cantidad de personas que estaban esperando, llegamos a la conclusión de que perderíamos, al menos, una hora. Así que disfrutamos de las vistas desde la base de la torre y hablamos con unas chicas españolas que acababan de llegar a S.F. para hacer un curso y se interesaron en que ver por los alrededores en los meses que duraría. Los escalones que llevan a la colina donde se encuentra la torre tienen nombres, entre ellos el de Christopher Lee, supongo que como dedicatoria.
























Estaba llegando el final del viaje, al día siguiente cogeríamos el vuelo de vuelta a Cincinnati y solo quedaban unas pocas horas en la ciudad, así que nos dedicamos a pasear con calma desde la Coit hasta Market Street, volviendo a pasar por China Town y por el Civic Center.
Sé que me han faltado muchísimas cosas por ver en la ciudad, pero ha sido muy poco tiempo y ha habido que dividirlo y, como a lo largo de todo el viaje, me iba con la sensación de que tendría que volver. Ahora entiendo la "fiebre" que tiene la gente con esta ciudad.































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